En el marco de la Residuos Expo 2021, el director de GTA Fernando López impartió una conferencia sobre los modelos de negocio para la industria de desechos, planteando un panorama lleno de problemáticas y soluciones para las empresas y el futuro de nuestro planeta. ¡Aquí te dejamos el resumen completo!
El problema que estamos enfrentando de lo que hemos visto durante 12 años de trabajo, no es nada fácil. Es un problema que va a requerir del esfuerzo de la sociedad, de los gobiernos y los privados para encontrar una solución factible.
Este círculo trata de explicar cómo funcionan las cosas.
Tenemos un consumo, que es el primer paso en la sociedad, e incluso es un consumo desmedido y que no se ha sabido manejar en función de los desechos ni sus impactos. Este consumo genera los residuos.
Por otro lado, hay un gobierno que por mandato constitucional, tiene la obligación de manejar los residuos. Y es un gobierno que, como todos sabemos, desgraciadamente en nuestro país y en general Latinoamérica no tenemos dinero para hacer este tipo de inversiones. Por lo tanto, hemos jugado a esconder la basura. Sin embargo, el gobierno hace las leyes, las concesiones, la medición, las tarifas, los permisos y las sanciones. Así que debe hacer uso de todos estos elementos para que las cosas cambien en el futuro y entender que tenemos solo 20 años para cambiarlo.
De ahí, tenemos el concesionario y el operador quienes toman la obligación que le correspondía al gobierno y tratan de obtener una rentabilidad con ella. Cuando hablo de rentabilidad, me refiero a que hoy el negocio puede ser rentable, bastante rentable. Recoger la basura, llevarla a un terreno y tirarla, ¡es rentable! El problema es que actualmente tenemos que cambiar un modelo rentable por otro que no es tan rentable y que exige una inversión alterna. Por eso, hay que apoyarse en la inversión privada: bancos e inversionistas. Les pido dinero y los inversionistas van a pedir lo mismo, rentabilidad y seguridad. Y cuando hablo de seguridad, me refiero a que trascienda el periodo, que no me extorsionen en el siguiente, que no me dejen de pagar… todas esas cosas que existen y debemos de superar.
De ahí viene la tecnología, y somos enfáticos en ella por lo que hemos visto. Que después de hacer el esfuerzo, resulta que te ofrecieron algo que no sirve y entonces tiraste tu dinero. Por eso la tecnología debe tener resultados probados, con productividad y cumplimiento.
Y finalmente, debería de cerrarse ese círculo con el gobierno y sociedad haciendo una evaluación de la rentabilidad de los objetivos y cómo vamos en cuanto a los objetivos parciales.
Todo esto genera hoy una contaminación alta y no funciona conforme a lo que estábamos viendo. Sin embargo, tenemos una serie de presiones externas y que nosotros vemos que van a cambiar el mercado de los residuos.
Presiones externas
Cambio climático (Implicaciones e Inversiones asociadas).
Lo primero es el cambio climático. Es una realidad. Si en los próximos 10 a 20 años no hacemos algo, las costas de nuestro país van a desaparecer. Una subida del mar de 1.5 metros, significa que Cancún, Acapulco ni ninguna de las costas existen.
Ya este año, Nueva York se inundó seriamente. Esto no es una broma, está ahí y seguirá empeorando si no hacemos algo para cambiarlo.
La segunda, es la tendencia a la utilización intensiva de materiales reciclados. Pero aquí hay que hacer una aclaración: las plantas de separación no sacan materiales reciclados, sacan materia prima para hacer materiales reciclados, después eso se lleva a una segunda instalación para transformarlos. Esta tendencia va a crecer en consecuencia a la primera, pues crece para responder al cambio climático.
El correcto manejo y el aprovechamiento del orgánico: Yo leí este fin de semana en el avión un artículo que me dejó impresionado. Del 50% que llega al relleno sanitario, dos terceras partes llegan ahí no porque nos las hayamos comido en nuestro hogar y las hayamos desechado, sino simplemente por la calidad que le estamos poniendo a los alimentos. Es decir, si un jitomate está amarillo, lo tiramos; si está golpeado, lo desechamos. Las cadenas productivas desechan materiales a lo bestia. Estamos tirando dos tercios de la comida de la humanidad sin aprovecharla. Y no solo la estamos tirando, la estamos enterrando para que nos genere gases de efecto invernadero y lixiviados que después se van al subsuelo. Es ahí en donde hay que pensar cambios radicales al hacer las cosas. ¿Cómo evitamos en la sociedad que esto suceda?
Tuvimos la oportunidad de ir a una de las instalaciones que manejamos con unos visitantes japoneses y a mí me llamó muchísimo la atención la visita porque iban ellos viendo la planta, yo pensaba que iban interesados, pero la realidad es que iban asustados. Y después de una hora de visita en la que no dijeron nada, al final dijo uno de ellos “¿Y todo esto lo hacen para separar la basura que debieron haber separado en su casa?” La respuesta fue sí. Sí, porque no la separan en su casa. A mí me cayó esa frase como una cubeta de agua fría porque ¡tiene razón! Estamos haciendo tonterías que nos están costando una millonada remediar.
El país requiere el doble de generación de energía y requiere el doble de la infraestructura para la distribución de la misma. Existe un déficit de energía y aquí hay una manera de corregirlo.
Disminución de fletes y costos asociados. Estuvimos platicando con la gente de Ciudad de México y nos decían que les cuesta 7 mil millones de pesos al año mover la basura. ¡Sólo moverla! Esos 7 millones de pesos si yo los pudiera emplear en instalaciones, cambiaría la estrategia y dejaría de pagar camiones que contaminan de manera excesiva y que hacen poco por solucionar el problema.
Optimización de los espacios disponibles. Otro de los grandes problemas de la ciudad de México es ¿qué hacemos con el poco espacio? Nos encontramos un terreno de 1.5 hectáreas y aquí tiene que caber una instalación para 1000-1500 toneladas diarias. Y así sucede en las ciudades grandes: encontrar un terreno con el espacio adecuado es una verdadera aventura.
Toda esta problemática, todas esas presiones externas, son las que van a producir un cambio en la manera de manejar los residuos.
Cambio de paradigmas
¿Qué es un paradigma? Algo que traemos en nuestra cabeza y que ya ni siquiera nos cuestionamos. Algo que decimos que es real y no pensamos. Un paradigma es no separar en casa. ¿Porque somos flojos, o porque nadie nos enseñó? Y esos paradigmas son los que producen cambios verdaderamente radicales.
¿Qué paradigmas vemos nosotros?
- La recolección urbana vs. Tratamiento real. Cuando alguien habla de residuos en México lo que piensa es en camiones, una cuadrilla de personas que va arriba haciendo la pepena y lo llevan a tirar a un terreno. Ese es el paradigma actual, cuando debería de ser cómo tratamos los residuos y cómo evitamos que se produzcan.
- “La mina de oro que tengo en mis manos”. Tú llegas a platicar con cualquier alcalde en este país y cree que tiene una mina de oro en sus manos. Y cuando se va sobre la problemática y ves que no tiene camiones recolectores, que la mitad no funciona y que no tiene dinero para invertir en recolección, ¿entonces dónde está la mina de oro? Manejar desechos no es un negocio tan lucrativo como la gente cree. De hecho es difícil hacerlo negocio. Manejar desechos no es negocio fácil, requiere de la tecnología y proceso adecuados, no pasa como por arte de magia.
- Reflejo del costo real ecológico y su cuantificación en los modelos de selección en el corto y mediano plazo.
- Asociaciones Público-Privadas. Debemos generar alianzas a varios niveles para lograr un manejo apropiado de los residuos, donde cada uno de los involucrados sea experto en su área, es decir que los constructores monten las plantas, déjennos el proyecto a los ingenieros y al al gobierno las gestiones y permisos necesarios, pero también le toca a la sociedad hacer consciencia de donde estamos parados y qué cómo debemos actuar. Llegar al punto que se requiere para hacer un cambio significativo requiere del trabajo conjunto.
- Inversión inicial VS. Costo de operación. En el ambiente industrial, te preocupas por el costo de operación. Sabes que hay una inversión inicial en maquinaria, pero es más importante invertir en una máquina que nos costará menos operar. Es decir, sí, a lo mejor voy a invertir más pero mi costo de operación tiene que ser menos. Aquí el multiplicador es muy alto. La ciudad de México maneja 13,000 toneladas de basura diarias: multiplica cualquier cosa por 13,000 y por 365 días al año y van a ver los números que salen. Entonces… ¿por qué nos preocupamos tanto por la inversión inicial cuando esa siempre tiene apoyo de fondos, de bancos, de gobiernos, y no nos preocupamos por cuánto nos va a costar operar ese sistema?
Me tocó hacer un estudio en Querétaro de 27 plantas de tratamiento de agua de las cuales funcionaban dos. Las otras 25 estaban abandonadas. Hicimos el mismo estudio en S.LP y pasó exactamente lo mismo. Llegamos a una planta que nunca se inauguró y se robaron todo el equipo y la pregunta fue ¿por qué nunca la inauguraron? La respuesta fue: no tenemos para pagar la luz. Entonces… ¿invertiste para después no poder operar? Eso es lo que está pasando.
- La creación de nuevos mercados para sub-productos generados. Yo todos los días escucho en este negocio “no hay mercado para la composta”. Y yo digo, bueno, ¿entonces por qué hay gente en todo el mundo que se dedica a hacer composta?, ¿por qué vendemos maquinaria para hacer composta? En EE.UU. Hay un montón de industrias laterales a eso, como la madera que usan para captar el agua e irrigar; el paisajismo, para hacer ciudades tan bellas. Hay un montón de mercados que no hemos desarrollado para darle salida a esos sub-productos. Entonces, no es un tema que nadie lo quiera, es que no hemos creado los mercados correctos para que se muevan.
- Desinformación ecológica (Comparativo de prácticas). Si alguien habla de incineración como valorización energética, todo el mundo se vuelve loco cuando en ciudades como Viena y Munich incineran media ciudad. De que se puede incinerar sin daño ecológico, ahí está la prueba y lo hacen en las principales ciudades del mundo como Japón. Entonces, ¿por qué le tenemos tanto miedo a la incineración que es una solución que nos puede dar energía? Tenemos un recurso permanente: se llama basura. Con esto no nos estamos peleando que si sopló el viento o que si salieron las nubes y dejaron de producir las celdas solares. Aquí todos los días se genera basura en nuestras ciudades que si convertimos en combustibles, tenemos una fuente permanente de combustibles para operar plantas de generación de energía de la cual carecemos. Estamos haciendo las cosas al revés. La excusa siempre es: “no tenemos dinero”.
- Marco legal, impuestos, sanciones y medición. ¿Cómo funcionan las plantas en otro lado? Con impuestos tremendos. En Alemania cuesta 120€ la tonelada de basura. Es decir, la gente paga por reciclar la basura y hacer algo con ella. En México tenemos una cuota de entrada al relleno sanitario de 180 pesos mexicanos, que son 4-5€ y nos asustamos que otros lados cobren 120. Bueno, pues es claro que si pagamos de 4 a 5€ no vamos a tener una instalación de 120€. Pero también tenemos el problema si pagamos solo 4 o 5€… ese es el tema, queremos ahorrar dinero donde debemos invertir, al no hacerlo el precio es mucho más caro y no es simplemente en temas de dinero.
Estos son los cambios de paradigma que hay que tener. Entonces, hay que detectar dónde tenemos que trabajar en el diagrama que vimos.
Dónde se hace el cambio
Lo primero empieza arriba en casa en un cambio de prácticas.
Tenemos que separar, aprender a hacer empaques que sean reciclables. “Oye este empaque está muy bonito porque un diseñador dijo” Sí, pero trae 3 plásticos diferentes, 4 etiquetas metidas y además pintaron la botella. ¿Para qué hicieron eso? Para que nadie lo pueda reciclar. El producto en sí mismo tiene que estar diseñado para que se pueda reciclar y ahí empieza el cambio. No empieza en la planta de separación. Empieza a partir de diseñar productos para que las plantas de separación puedan trabajar.
Por otro lado, ya que se hace el esfuerzo por separar llega el camión de la basura y combina todo. Tenemos que cambiar cómo la movemos y todo eso, está en la sociedad. Lo que les contaba yo de los orgánicos: si este tomate está golpeado ¡no lo tires! Entrégaselo a una segunda institución y que hagan guacamole con él o un caldo y me lo voy a comer como si estuviera rojo y grandote. Tenemos una sociedad que necesita alimentos y los estamos tirando.
Tenemos en otra parte el gobierno, que es fundamental en todo esto y tiene que actuar, es uno de los motores.
El operador. Tiene que ser consciente de que si va a obtener una concesión tiene una carga social y una obligación social a su cargo. Entonces tiene que pensar en otros modelos de negocio para operar.
Después, que se lo demás opere correctamente: si me vendieron una máquina, que funcione bien; que si me dieron una concesión, me paguen; que si me dijeron que era a 20 años no me tenga que estar peleando cada 3 o 6 años.
Alternativas propuestas
Diseño de empaque enfocado en el reciclado y la disposición final.
Tiene que haber un esfuerzo colectivo y una exigencia de la sociedad. A mi me dio mucho gusto ahora en nuestro stand ver llegar empresas grandes preocupadas que se preguntan qué hacer con mis empaques, con mi producto obsoleto, cómo lo manejo. Ahí empieza un gran cambio con estas grandes empresas que cuentan con redes de distribución muy potentes como los supermercados que se empiezan a preocupar por hacer las cosas diferentes
Cuidado en la correcta selección de materiales, de productos.
Es fundamental, no podemos hacer cosas que no puedan reciclarse. Un ejemplo: tenemos un cliente que es capaz de recolectar en una semana 90 toneladas de aluminio. Multipliquen por el precio del aluminio y van a ver la millonada que hay ahí. Si todas fueran empaques de aluminio, estaríamos reciclando, porque eso sí es una mina de oro. ¿Qué es lo que hay que hacer entonces? Empaques pensados para ser reciclados. Pero si me mandas un plástico que no sirve para nada -y no estoy en contra de los plásticos, al contrario, funcionan bastante bien- pero si me mandas material que no sirve, me estás metiendo en problemas a la hora de reciclar.
Manejo apropiado de la materia orgánica considerando su generación, calidad, disposición y uso de los productos derivados de su procesamiento.
Tenemos que aprender a crear mercados laterales para los productos.
Educación Social Intensiva en la separación en casa, recolección y traslado diferenciados.
Hay que educar a la gente, hay que llevarla a las plantas, enseñarles qué hay que hacer.
La creación de nuevos mercados para productos generados, generando círculos virtuosos.
Unos de nuestros principales clientes son las cementeras, porque tienen sistemas de incineración muy potentes y pueden quemar el Combustible Derivado de Residuos. Pero si nosotros nos quitamos el paradigma de la cabeza, en vez de que fueran las cementeras exclusivamente nosotros generáramos las plantas de energía que necesitamos, estaríamos generando CDR todos los días y en todos lados. Porque en todos lados tenemos la capacidad y la materia prima permanente.
Difusión de una cultura ecológica realista y comparativa.
No hay nada perfecto. Todo sistema que yo quiera poner va a tener sus contras. La pregunta es: ¿qué prefieres: incinerar y tener energía o enterrar? Es un tema comparativo, no uno destructivo. Cualquier sistema por más perfecto que queramos tener, le vamos a encontrar contras. Pero el tema es: ¿qué gano con un sistema respecto a lo que tengo hoy?
Política fiscal mediante inversión y operación ambiental favorecida.
¿Qué quiere decir? Recibir apoyos e incentivos por parte del gobierno, un ejemplo que se me ocurre, tu empresa invierte en plantas de basura y te hago una exención de impuestos. Y si inviertes en comprar el producto que sale de esas plantas de basura para reciclarlo, te lo considero dentro de tus impuestos. ¡Se acabó el tema de que no hay dinero! Pero darles el incentivo fiscal para que ese dinero fluya donde tiene que fluir. El dinero existe en demasía en el mundo. Lo que no saben es dónde invertir y uno de los principales obstáculos son las políticas fiscales. Nosotros hemos visto fondos increíblemente grandes que lo único que te dicen es “garantízame el modelo de negocio”.
Aplicación de un marco legal, basado en la medición y las sanciones.
Necesitas un marco legal ESTABLE que te permita hacer estas cosas.
Necesitamos que las leyes sean un respaldo que invite a la acción, con la medición adecuada de la información y las sanciones correspondientes al incumplimiento de las mismas.
Si el problema del gobierno es el dinero, queremos que los inversionistas privados encuentren incentivos adecuados para invertir su dinero en temas de tratamiento de basura, generar las ya mencionadas alianzas público- privadas y todos los puntos que ya mencioné anteriormente.
La visión económica
Al final del camino, VISIÓN ECONÓMICA, es superable y eso es lo que quiero que se lleven. Me interesa ver un problema que llevo 12 años estudiando y que nos está afectando (y seguirá afectando) de una manera tremenda en el futuro, para sembrar en cada uno de ustedes la idea de que tiene solución; si como sociedad le exigimos al gobierno que lo solucione porque sabemos que nos va a afectar a todos. A mi ya no me va a tocar, pero sí a mis hijos y, a mis nietos y no quiero que suceda.
Inversión inicial, fomento a empresas en impuestos a la inversión y operación.
Hay que hacer inversiones privadas y, públicas, destinar los impuestos a lo que realmente funciona. Debemos encontrar los medios correctos para llamar la atención de nuestras autoridades, el mismo sistema de basura es base primordial para el funcionamiento de la sociedad. Debemos exigir que se lleven a cabo las acciones e inversiones correctas para subsanar el daño actual.
Costo de operación, nivel de flotación, Gate fee..
No es tan difícil. El costo de operación de una planta de separación es de alrededor de 6€ (150 MXN aproximadamente). Entonces no es una cifra inalcanzable.
Utilidad VS productos generados.
Si mediante impuestos me dan la inversión para iniciar la planta y mediante el “Gate Fee” puedo operarla, los productos que obtenga me van a generar la utilidad.
Espero que las ideas expuestas sirvan para sembrar la semilla de que sí podemos cambiar a México, cambiar a Latinoamérica. Queremos transmitirles lo que hemos aprendido en todos estos años para instruir a su familia y generar la presión social que necesitamos para salvar nuestro hogar.
Sesión de preguntas
1. ¿Cuáles sectores del país son los que generan más basura? Si son los de casa habitación, los de industrias o qué clases de industria. De esto resultan los proyectos. ¿Cómo podemos intervenir las pymes? Gran parte de la industria en México está en las pymes. ¿De qué manera podemos intervenir?
En las estadísticas de SEMARNAT se encuentran todos los datos, en el sector urbano y domiciliario, el sector industrial está ocupado por compañías que se dedican a esto. Si quiere hacer algo “fuerte” es en el sector domiciliario. Si quiere entrar a negocios lucrativos hay que entrar a la industria del reciclado, ahí es donde está realmente el dinero, pero no en reciclado pensar que yo voy por residuos, los traigo y los vendo, es la transformación de los residuos; es decir, darles valor de segunda instancia.
2. No hay una gráfica global general, cada estado tiene su diagnóstico básico de generación de residuos, porque no es lo mismo lo que se genera en la ciudad de México, que lo que se genera en jalisco, en Querétaro o en baja california. La termovalorización de los residuos se entiende como una alternativa de reciclaje para poder obtener energía de los residuos, pero ¿Qué le recomendaría usted a un mercado como es mi caso en el que estoy pensando en una planta de termovalorización pero tengo una inseguridad muy grande al pensar en tener que realizar una modificación y trabajar en un futuro con la comisión federal de electricidad y bajo sus términos? El mercado de privados que están generando actualmente energía ese 49% va a ser solo de ellos; Nosotros las nuevas empresas que pensamos en la termovalorización ¿qué podemos hacer?
Lo que hay que hacer es producir combustibles, no producir energía. Es como si usted tuviera la gasolinera y vendiera el combustible o el diesel para que alguien lo utilizara, no se preocupe por producir la energía. Si la CFE la tiene que producir porque alguien lo decidió así, que la produzca. Lo que hay que dar son los combustibles para que la pueda utilizar, los combustibles sí salen de los residuos. Hay combustibles que podemos sacar de todo lo que ya dijimos, CDR (combustibles derivados de residuos) y hay combustible que podemos sacar de la parte orgánica que se puede aprovechar. Y regresando a la gráfica, si pudiéramos tomar estos dos sectores, estamos hablando del 80% de la basura. Produzcan combustibles, si mañana cada ciudad todos sus desechos los transforman en combustibles, acabamos con el problema energético. Ya después se verá cómo aprovechar tanto combustible y vendrá la solución en el sector energético y los demás.
Lo primero que hay que hacer es producir combustibles, decir aquí están todos los combustibles, ¿ahora qué sigue? “es que no tenemos dinero para hacer las plantas” entonces déjanos participar para hacer las cosas.
3. ¿Qué es más redituable convertir la basura en combustible o reciclarla?
Reciclarla es mucho más redituable que hacer combustibles. Reciclarla por kilo prendido va a ser mucho más rentable, pero la cantidad de kilos que vas aa tener haciendo combustible es 16 más que la que pasa a tener haciendo combustible. Si tú quieres entrar a un negocio lucrativo, recicla, pero recicla bien. Haz todo el proceso que se necesita para reciclar.
Texto de Alejandra del Río.