El mito de la mina de oro en los residuos urbanos
La idea generalizada es que los residuos urbanos son una mina de oro lista para ser explotada. Y si bien es cierto que la basura de uno es el tesoro de otro en el caso de los desechos urbanos, la realidad dista mucho de ser así.
El aprovechamiento de residuos urbanos requiere de un minucioso análisis del contexto, el cual tiene mucho más que ver con las leyes que aplican a su manejo y con el nivel de integración que se esté dispuesto a tener para su transformación en productos y por supuesto, en lo que es necesario invertir para ser alcanzado.
En general el residuo sólido urbano (RSU) de las ciudades, requiere de un nivel importante de subsidio por parte de la sociedad a través de los gobiernos para su transformación y procesamiento. Esto puede darse por medio de:
a) una cuota de entrada al centro de procesamiento, ya sea por tonelada recibida o procesada o
b) por medio de un arreglo en el que se considere este subsidio al ser aplicado directamente al usuario final a manera de impuesto.
Los niveles de cuotas varían de país a país y en función también de la tecnología que se haya seleccionado para el procesamiento de los residuos. Pero en general son importantes en relación con el costo del procesamiento a realizar.
Sugerencia de lectura: El marco jurídico, su homogeneidad y el manejo de los residuos
Al final la ecuación como siempre, debe por lo menos nivelar los ingresos requeridos para la operación (que incluye la separación de los desechos urbanos), con los egresos generados por la misma para poderse sostener de manera autónoma.
La realidad desde el punto de vista técnico-económico es simple. Se basa en la capacidad de generar productos comercializables a partir del procesamiento de los desechos urbanos y en los costos que ocasionan aquellos flujos de material que no alcanzan una comercialización directa.
Dicho esto parece obvio que pensemos en generar todo aquello que sea posible para comercializarse, lo cual es lógico, pero teniendo en cuenta que todo proceso en realidad tiene en sí mismo un nivel de residuos propios y que éstos deben formar parte del balance de masas requerido para el análisis. Es decir, siempre se debe considerar el nivel de transformación real que es posible obtener y el destino y costo de manejo de los subproductos, o desechos propios del proceso propuesto.
El análisis del entorno
Aquí es donde entra en consideración fuertemente EL ENTORNO propio en el que se encuentra inmerso el proyecto. Distancias, propiedades, permisos, regulación y mercado determinan para cada uno en particular las condiciones a satisfacer para el correcto manejo y rentabilidad de la solución planteada. Por eso es que cada proyecto debe ser diseñado específicamente tomando en cuenta lo anterior, pues aunque tengan objetivos similares, las necesidades pueden ser diferentes.
Distancias, propiedades, permisos, regulación y mercado determinan para cada uno en particular las condiciones a satisfacer para el correcto manejo y rentabilidad de la solución planteada. Por eso es que cada proyecto debe ser diseñado específicamente tomando en cuenta lo anterior, pues aunque tengan objetivos similares, las necesidades pueden ser diferentes.
La creación de valor en el reciclaje
Por otro lado, el mercado de reciclados premia el nivel de pureza y procesamiento del material. Por lo que a más procesos de transformación integrados en el proyecto, mayor nivel de precio del producto. En esta parte nuevamente se requiere de decisiones en cuanto a hasta dónde es rentable llegar en la CREACIÓN DE VALOR propuesta.
El modelo financiero y modelo de negocio en los residuos sólidos urbanos
Finalmente todo esto se refleja en el nivel de inversión que se debe llevar a cabo para satisfacer todas estas variables, por lo que como siempre el MODELO FINANCIERO final de la solución planteada en la definición, permitirá al inversionista la última decisión al permitir la visión global del planteamiento.
La creatividad en cuanto a los planteamientos a realizar, requiere del conocimiento de las condiciones reales a satisfacer, así como de las posibilidades existentes en el mercado tecnológico y de los productos generados.
También en gran medida proporciona el panorama completo de las negociaciones que el inversionista requiere alcanzar con los participantes en la cadena de valor en que el proyecto será realizado para el logro de su éxito, por lo que este conocimiento es primordial en términos de la viabilidad real que el negocio tendrá y de su MODELO DE NEGOCIO.
Ya sea que se trata de un desecho urbano como el residuo sólido urbano, de un desecho industrial o comercial, o de una biomasa, este proceso de análisis y el respeto a la metodología son requeridos para la elaboración de un correcto MODELADO de la situación propuesta y la definición de las expectativas que podemos esperar de esta “Mina de oro”.
En GTA AMBIENTAL contamos con expertos para llevar a cabo este proceso de análisis de entorno y viabilidad de tu proyecto. Nuestro equipo está al tanto de las innovaciones tecnológicas más vanguardistas en el mercado y con su experiencia, saben ayudarte a definir de manera correcta un modelo de negocio rentable y autónomo a partir de los desechos urbanos.